Fue una larga noche, después de aniquilar a todos los troll’s invasores nos dedicamos a reducir las llamas del pueblo que en ese momento ardía de tal manera que parecía el infierno. Después de 3 horas terminamos de aplacar el fuego, pero fue muy tarde muchos aldeanos murieron calcinado como así también personas de mi regimiento, pero lo peor fue que todas las contracciones del pueblo fueron deshechas por las llamas.
Descansando a un lado de las ruinas después de una fatigada noche y triste por la impotencia de no haber podido hacer mucho distingo una silueta de dos personas que venían a caballo, uno era un hombre de apariencia media extraña y la otra era una mujer la cual se me hacia muy conocida, así que me levante y tome mi espada por seguridad, y cuando ya estaban a 5 metros aproximados de mi la mujer da un salto del caballo al suelo y con una mirada de amor y tristeza se acerca y me dice
- que alegría de poder verte nuevamente. Llorando mientras hablaba. Y yo sin poder distinguir su rostro por culpa del sol le digo
- disculpadme señorita, pero quien sois?
- Ya no te acordáis de mi amado Berphometh?
- Lo lamento señorita pero no recuerdo haberte visto nunca.
y ella herida con mis palabras, ella se enrojece de furia. Pero cuando el sol dejo de molestarme en los ojos distingo el rostro de Nimyara, y en cuanto le iba a saludar ella enfadada reacciona dándome un puñetazo en la cara con el cual me arroja unos metros por el suelo, sobándome la cara del dolor Nimyara me abraza y llorando me dice
-te extrañe demasiado, a sido terrible desde que partiste de la taberna. Y sin saber que decir le digo.
-eeeeemmmhh.
-primero tu te vas, después llega este hombre que esta al lado mio, después llegan unos soldados a buscarte, después me golpean, luego destruyen la taberna y me quedo sin hogar, por ultimo viajo sin rumbo tratando de buscarte al lado de este que solo me cuenta historias de un mundo que conozco y ya me tiene harta.
-discúlpame si te cause algún daño.
Llorando nuevamente la consuelo, pero dejándola de lado me acerco hacia el hombre de extraña apariencia.
-yo os he visto en alguna parte?
-ahhhhhh tu debes de ser mamerto.
-¿?
-el tipo a quien Nim busca
-disculpa pero mi nombre es Berphometh.
-aaaaahhh si lo que sea
Descansando a un lado de las ruinas después de una fatigada noche y triste por la impotencia de no haber podido hacer mucho distingo una silueta de dos personas que venían a caballo, uno era un hombre de apariencia media extraña y la otra era una mujer la cual se me hacia muy conocida, así que me levante y tome mi espada por seguridad, y cuando ya estaban a 5 metros aproximados de mi la mujer da un salto del caballo al suelo y con una mirada de amor y tristeza se acerca y me dice
- que alegría de poder verte nuevamente. Llorando mientras hablaba. Y yo sin poder distinguir su rostro por culpa del sol le digo
- disculpadme señorita, pero quien sois?
- Ya no te acordáis de mi amado Berphometh?
- Lo lamento señorita pero no recuerdo haberte visto nunca.
y ella herida con mis palabras, ella se enrojece de furia. Pero cuando el sol dejo de molestarme en los ojos distingo el rostro de Nimyara, y en cuanto le iba a saludar ella enfadada reacciona dándome un puñetazo en la cara con el cual me arroja unos metros por el suelo, sobándome la cara del dolor Nimyara me abraza y llorando me dice
-te extrañe demasiado, a sido terrible desde que partiste de la taberna. Y sin saber que decir le digo.
-eeeeemmmhh.
-primero tu te vas, después llega este hombre que esta al lado mio, después llegan unos soldados a buscarte, después me golpean, luego destruyen la taberna y me quedo sin hogar, por ultimo viajo sin rumbo tratando de buscarte al lado de este que solo me cuenta historias de un mundo que conozco y ya me tiene harta.
-discúlpame si te cause algún daño.
Llorando nuevamente la consuelo, pero dejándola de lado me acerco hacia el hombre de extraña apariencia.
-yo os he visto en alguna parte?
-ahhhhhh tu debes de ser mamerto.
-¿?
-el tipo a quien Nim busca
-disculpa pero mi nombre es Berphometh.
-aaaaahhh si lo que sea
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